martes, 13 de marzo de 2007

Muchas veces son muy burdos

En 1493, el humanista alemán Schedel publicó su miscelánea Liber Chronicarum, muy atractivo porque contenía más de mil grabados sobre los asuntos de que trataba. Hoy resulta curioso saber que los más de seiscientos retratos de políticos y gobernantes de la época se elaboraron a partir de tan sólo sesenta grabados originales. Haced la cuenta: de cada grabado sacamos el careto de diez tipos. No parece un ejemplo de rigor histórico, pero a la gente de la época no parecía importarle.


¿Os imagináis eso hoy?


1 comentario:

Fer dijo...

Te imaginas un Zapatero con un aire a Fraga? Por dios!!